¿Como avivar la llama de la Pasión?
2023-12-22Un toque de magia, para tus relaciones.
2023-12-20Publicado el 2019-08-04
Llevar un estilo de vida sano en el que practiquemos deporte varias veces a la semana siempre es una buena idea. Lo que quizás no sepas es que existe un tipo de orgasmo que se puede conseguir haciendo ejercicio.
Puede que el término coregasmo te suene a algo nuevo, pero lo cierto es que este fenómeno fue descubierto por Alfred Kinsey a mediados del siglo XX. Así que de nuevo, nada de nada. Y sí, se trata justamente de lo que parece, alcanzar el orgasmo a través del ejercicio físico.
Quienes lo han experimentado señalan que es diferente al clímax alcanzado a través del sexo. Son orgasmos suaves y agradables, pero que producen una gran satisfacción.
Lo cierto es que ni los científicos tienen muy claro qué es lo que ocurre en este caso. La teoría mayoritaria es que al hacer ejercicio involucramos la parte central de nuestro cuerpo (el core) para estabilizarnos, lo que a la vez lleva a contraer los músculos pélvicos.
Pues bien, cuando los músculos del suelo pélvico y la zona abdominal están inestables y fatigados, dan lugar a una estimulación interna que desemboca en el coregasmo. De hecho, se considera como un fenómeno de naturaleza asexual, ya que se produce con independencia de los pensamientos y fantasías de carácter sexual.
Tanto hombres como mujeres pueden conseguir un orgasmo de este tipo, aunque la estadística pone de relieve que es más común entre el sexo femenino que entre el sexo masculino.
Pero si estás pensando en ponerte a practicar deporte para conseguir llegar al éxtasis de esta manera, te advertimos que es complicado.
A día de hoy no existe un patrón fijo que pueda activar los músculos que dan lugar al coregasmo. Puedes pedirle a tu entrenador que te haga una tabla para perder peso, para ganar masa muscular, para ser más ágil… pero no le puedes pedir una que te ayude a tener orgasmos mientras te ejercitas.
Sin embargo, si hay ejercicios que parecen favorecer esta sensación. En el caso de las mujeres hay que destacar los empujes de cadera, las sentadillas, los abdominales y las elevaciones de piernas. Mientras que para los hombres les pueden funcionar bien las sentadillas, los pullups y el levantamiento de pesas.
Por el momento no hay muchas investigaciones sobre este tema, pero parece que el ejercicio físico se puede convertir en un camino hacia el placer. Además, no debemos olvidar que hacer ejercicio nos ayuda a liberar endorfinas, lo que a su vez ayuda a despertar el apetito sexual.
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